LA SEGUNDA
Crítico balance de expertos:
Reforma de pensiones parte desde foja cero en Senado
Tras la intensa jornada de ayer en la Cámara de Diputados, donde se aprobó el proyecto de reforma previsional, para continuar tramitándose en el Senado, el mundo técnico saca una conclusión tajante: las definiciones de fondo las tomará el Senado, pues consideran que –dado que se cayeron una serie de artículos clave- sólo se aprobó un armazón que se debe llenar desde cero. entre ellos, temas clave como la reorganización de la industria y la distribución de la cotización adicional.
¿Dónde va el 6%?
Según el doctor en Seguridad Social, Hugo Cifuentes, aún queda todo por definir: ‘Con lo que contamos es con armazón en el cual hay que ordenar la forma de darle consistencia’.
El académico y miembro de la comisión Bravo comenta que el punto más grande a resolver es la cotización adicional, ya que ‘el 6%, todos los sectores están de acuerdo en incrementarlo, pero curiosamente la mayoría de los diputados no estuvo por aprobarlo’.
Una opinión similar tiene el miembro de la Comisión Marcel y presidente de ICR, Álvaro Clarke, quien expone que ‘el principal punto es en torno a la distribución de la cotización que quedó sin definición, porque no fue aprobado’. El economista considera que a partir de marzo, las discusiones comenzarán en un entorno totalmente diferente y desafiante para el oficialismo.
‘Este es un tema que lleva mucho tiempo en discusión, sobre el cual no hay ningún indicio de que pueda haber algún tipo de solución. En consecuencia, y pese a que el proyecto se va a despachar al Senado, es como si se tuviera que reiniciar una discusión sobre este tema’, puntualiza el economista, que recomienda que el foco de discusión en el Senado debería ser más técnico y menos ideológico.
David Bravo: todo desde cero
Aspirando a que en el Senado el foco sea técnico, el economista David Bravo comienza sus análisis con el mismo diagnóstico lapidario de sus colegas: ‘En la práctica, el proyecto ahora se va a empezar a ver desde cero. Porque logró la aprobación en general, pero luego dentro solo quedaron titulares’.
El director del Centro UC de Encuestas y Estudios Longitudinales remarcó su crítica a los estudios de tasas de reemplazo utilizados por el Gobierno. Instó al Ejecutivo a tener este insumo clave con anticipación y con datos corregidos.
Agrega que en la nueva discusión se deben abordar temas como la informalidad laboral y el aumento en la tasa de cotización de las mujeres, que no se ha abordado anteriormente en ninguna reforma, pero que aparece mencionada en todos los diagnósticos técnicos.
La mirada de los ex ministros
‘Quedó todo pendiente, la verdad’, dice Osvaldo Andrade. El exministro del Trabajo de Michelle Bachelet concluye que ‘se avanzó en el tema de que hay voluntad de los actores políticos de enfrentar una discusión’, pero agrega que aún resta definir la estructura de la industria y el diseño de la cotización adicional.
Una opinión similar tiene el extitular del Trabajo en la administración Piñera, Nicolás Monckeberg, quien califica lo aprobado como ‘un tutti-frutti, una mezcla contradictoria de unas cosas con otras, y por tanto estamos en foja cero’. Dentro de las inconsistencias, el abogado expresa que tras el resultado de ayer, ‘no es compatible subir las cotizaciones 6%, entregarle 3 a la cuenta individual, 3 a la solidaridad que planteaba el gobierno y además incorporar un seguro de longevidad como prometió el gobierno al PPD’.
El suma y resta
Según la directora de evidencia de Pivotes, Elisa Cabezón, hubo dos elementos del proyecto del Gobierno que no pasaron la barrera de la Cámara de Diputados y que, según la economista empeoraban la iniciativa.
En el proyecto del gobierno, se establecía que un 3% de las cotizaciones de los trabajadores se depositaran en el Fondo Integrado de Pensiones (FIP) para pagar principalmente una garantía con solidaridad intergeneracional.
‘El problema es que bajo ese diseño, el gasto de esta garantía era transitorio, pero el financiamiento mediante el 3% de cotización era permanente, acumulándose un fondo estatal con los años. Estaba el riesgo de que este fondo estatal se usara en el futuro para financiar medidas distintas a las de pensiones o populistas’, sostiene la académica, que agrega que otro elemento rechazado ayer que genera alivio es la creación del Inversor Previsional Estatal (IPE).
‘El riesgo con este inversor es que no se veía claro que se cumpliera la neutralidad competitiva respecto a los inversores privados, arriesgando la participación de estos últimos. Pero la Cámara aprobó una medida que será muy dañina para las pensiones: el autopréstamo del 5% de la cuenta individual. Esto distorsiona el fin del ahorro previsional: pagar futuras pensiones, que es lo opuesto a financiar el consumo presente’, comenta Cabezón, quien puntualiza que con esta decisión se reabre ‘una puerta muy peligrosa’.