LA TERCERA
Autonomía de los establecimientos
Señor Director:
La reactivación educativa sigue siendo una de las mayores urgencias de nuestro país, y en la última semana vimos luces en el debate que vale la pena destacar. El pasado viernes se realizó el Encuentro 3xi de educación en Valparaíso, donde una de las grandes conclusiones fue la necesidad de darle mayor autonomía a las escuelas; esto, porque no solo tienen grandes desafíos en materia de aprendizajes, sino que se enfrentan a un aumento en la violencia escolar, grandes problemas de salud mental de los alumnos, alta deserción, y no cuentan con infraestructura para reintegrar a sus alumnos y monitorear inasistencias graves, un rol múltiple que queda muy bien relevado en la columna escrita ese mismo día por la exsubsecretaria Valentina Quiroga en su medio. Si a ello sumamos que el ministro Nicolás Cataldo llamó a un gran acuerdo para “romper la inercia en materia de aprendizajes”, parecemos estar ante un diagnóstico compartido y transversal.
Sin embargo, esto contrasta con que durante este año hemos desperdiciado una de las posibilidades más inmediatas que tenemos para potenciar esa autonomía de los establecimientos. Desde Pivotes estamos impulsando un proyecto de ley que flexibiliza y moderniza la subvención escolar preferencial (SEP), lo que permitiría mayor amplitud en el uso de estos recursos para múltiples necesidades. Si bien se logró poner la iniciativa en la agenda educativa del Senado, el gobierno hizo indicaciones en el sentido contrario a la flexibilización, y pese a que han pasado tres meses, todavía no va a la comisión respectiva a explicarlas.
En momentos en que se busca impulsar agendas comunes, la educación tiene que ser la prioridad. Nuestro llamado es a reactivar este debate para aprobar el proyecto de ley durante este año y no seguir en el inmovilismo.