Diario Financiero
BYD a contrapelo
Señor Director:
BYD se adjudicó el año pasado litio a precio preferente para levantar una planta de material catódico. Transcurridos 13 meses, apenas ha avanzado. La empresa culpa a la lentitud del gobierno, y el gobierno retruca que ha cumplido. Sin intención de terciar, una cosa es clara: si el litio fuera concesible no enfrentaríamos estos problemas. BYD busca asegurar suministro de litio —la planta es en esencia un medio para ese fin— y de no ser por esta absurda anomalía regulatoria habría invertido hace rato mucho más que los US$ 290 millones de la planta, más bien modesto para estándares mineros. Llevaría años tributando impuesto corporativo y royalty, y ofreciendo cientos de empleos muy bien pagados. Todo sin sacrificio fiscal por venta de litio a precios preferentes. Si de añadir valor agregado se trata, la concesibilidad allanaría el que la producción de material catódico surgiera en forma espontánea si acaso es de verdad atractivo. Y si no lo es, pero apostamos por fomentarlo, hay que partir por volver más expedito el cúmulo de permisos y trámites, el mismo que en gran medida explica por qué bajamos desde el 6° puesto en el ranking de atractivo minero en 2018 al 38°.