Liceos Bicentenario: impacto vs. ideología

Señor Director:

La iniciativa Liceos Bicentenario ha sido una de las políticas educativas más exitosas de la última década y con un propósito claro: acelerar la entrega de educación pública de alta calidad a las familias de menores recursos. Reflejo de la efectividad de los Liceos Bicentenario no solo son los resultados de la evaluación Simce 2023, donde 14 de los 20 mejores resultados de liceos públicos corresponden a Liceos Bicentenario, sino también las percepciones de las familias. Así, datos del Sistema de Admisión Escolar (SAE) revelan que los Liceos Bicentenario se encuentran entre los colegios con mayor cantidad de postulaciones a nivel nacional y reciben, en promedio, más del triple de postulaciones en primera preferencia que el resto de los establecimientos.
Todo lo anterior hace sumamente preocupante el mínimo avance en la ejecución presupuestaria de los Liceos Bicentenario, que alcanzaría el 11,4% de lo asignado para este año. El Ministerio de Educación se justifica en el proceso de firma de convenios de los 80 nuevos Liceos, pero no es novedad que los procesos administrativos toman tiempo. Lo novedoso es la aparente desidia con la que el Ministerio actúa ante una iniciativa que desde el inicio quiso eliminar.
Los Liceos Bicentenario han tenido más impacto en calidad educativa y más reconocimiento ciudadano que cualquiera de las reformas que se han implementado en el sistema escolar desde 2014. Si esta iniciativa se deteriora por mezquindades ideológicas, los que más pierden no somos quienes promovemos su existencia, sino las familias que han confiado en la educación pública y han encontrado en estos colegios la mejor opción para acceder a mayores oportunidades para sus hijos e hijas.