Economía sin dinamismo:

Existe una extensa literatura económica que habla del “efecto recesivo de la expansión fiscal”: cuando un país gasta sobre sus capacidades de financiamiento puede provocar una contracción del sector privado. Por un lado, porque se genera entre los privados la expectativa de que el Estado tarde o temprano subirá los impuestos, lo que afecta la confianza de las empresas e inversionistas.  Y, por otro lado, la mayor actividad del gobierno da menos espacio a las iniciativas privadas en la economía nacional. Los datos muestran señales de este efecto en Chile.

Desde 2008, el gasto estatal ha crecido considerablemente, pasando de un 19,3% del PIB en 2007 a un 27,4% en 2023, acumulando deuda bruta del Gobierno Central. Este mayor gasto fue acompañado de alzas de impuestos corporativos y de un deterioro en la confianza de las empresas, lo que se reflejó en un estancamiento del sector privado en inversión y en empleo, a partir del año 2013.

¿Este mayor gasto estatal se destinó a políticas pro-crecimiento, con mirada de largo plazo? El análisis del destino del gasto estatal indica que no. La inversión pública en capital fijo fue a la baja, mientras que el gasto público en personal fue al alza. ¿Este mayor gasto en personal se tradujo en un mejor servicio del Estado hacia los ciudadanos? Tampoco. No se ven mejoras en la efectividad del gasto estatal y se observan caídas en la confianza de los ciudadanos hacia el gobierno.

En Pivotes proponemos medidas que mejoren la calidad del gasto público y ser más exigentes en qué gastamos: modernizar el régimen de empleo público y crear una Agencia de Calidad de Políticas Públicas.

Conoce más en el estudio elaborado por Elisa Cabezón y Joaquín Sierpe: «Economía sin dinamismo: el gasto público crece y el sector privado se estanca».