Radiografía del sistema escolar en Chile:

En Chile, el sistema escolar ha atravesado importantes transformaciones desde los años 80, cuando se introdujo un modelo mixto que permitía la coexistencia de establecimientos públicos y privados, financiados en gran parte a través de subvenciones del Estado por cada alumno que asiste al establecimiento. Esta estructura se diseñó con el propósito de mejorar la cobertura educativa y elevar la calidad a través de la competencia entre las instituciones. Sin embargo, a pesar de los avances, persisten desafíos relacionados con la segregación escolar y la equidad en los resultados educativos.

Evolución de la cobertura escolar

Uno de los mayores logros del sistema escolar chileno ha sido el aumento de la cobertura. En 1990, sólo un 53% de los estudiantes de entre 6 y 19 años asistían a clases, cifra que para el 2022 alcanzó un 97%. Este avance fue impulsado en gran parte por la expansión de los establecimientos particulares subvencionados, que pasaron de atender al 18% de los niños en edad escolar en 1990 a más del 50% en la actualidad.

Evolución de la calidad en educación

Hay señales de mejoras en la calidad de la educación: se redujo la brecha de puntajes de los grupos socioeconómicos Bajo, Medio bajo y Medio respecto al grupo de mayor nivel socioeconómico en la prueba Simce de 4° básico. Entre el 2002 y 2023 la brecha se redujo en un 32% para el GSE Bajo y Medio, y en un 38% para el GSE Medio Bajo.

Segregación en el sistema escolar

A pesar de las mejoras en la calidad y cobertura del sistema educativo, la segregación sigue siendo un problema estructural. Los estudiantes de menor nivel socioeconómico asisten mayoritariamente a establecimientos estatales, mientras que aquellos de niveles más altos se concentran en colegios particulares subvencionados y pagados. Y si bien se han reducido las brechas de rendimientos académicos, la diferencia de puntajes del Simce de 4°básico entre los estudiantes de los grupos socioeconómicos más bajos y los más altos es equivalente a una desviación estándar.

Propuestas para fortalecer el sistema

Frente a estos desafíos, en Pivotes proponemos varias medidas que buscan mejorar la calidad educativa y reducir la segregación. Creemos en la importancia de una competencia justa entre establecimientos públicos y privados, basada en altos estándares regulatorios y en la eliminación de barreras para la creación de nuevos colegios particulares subvencionados. Además, para mejorar la educación estatal en que asisten los más vulnerables, proponemos que los mejores sostenedores –independiente si son estatales o privados– puedan administrar los establecimientos a través de una administración delegada.