Segundo programa de incidencia

Hagámonos Cargo

Segundo programa de incidencia pública de Pivotes

Chile se encuentra en un punto de inflexión, en una verdadera encrucijada. De nuestra capacidad de reacción dependerá si de ella salimos fortalecidos. Pasemos a la acción, porque los desafíos comunes nos competen a todos y, en este caso no pueden seguir esperando.

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Sobre el Programa Hagámonos Cargo

Queremos invitar a quienes son parte del debate público a que nos “hagamos cargo”, tomándole el peso a la magnitud de los desafíos asociados a las 4 crisis.

Sobre el Contexto

La frase “Chile se encuentra en un punto de inflexión, en una verdadera encrucijada”, se repitió en los días y meses posteriores al estallido de octubre de 2019. Se agregaba que “de nuestra capacidad de reacción, y de la envergadura de esta dependerá si de ella salimos fortalecidos, o si nos sumimos en el estancamiento y la mediocridad”. Las fichas estuvieron puestas, en ese entonces, en el proceso constitucional.

No obstante, luego de dos procesos constitucionales fallidos y prontos a iniciar un ciclo de 2 años con 6 contiendas electorales, el país corre el riesgo de volver al corto-placismo de soluciones simples para desafíos complejos o al inmovilismo, lo que implica, una vez más, postergar los cambios sustantivos que se requieren para enfrentar las diversas crisis que vive el país.

Ni la institucionalidad, ni la economía, ni el empleo, ni la educación gozan de salud hoy por hoy. Por el contrario, hay cierto consenso en las profundas dificultades que enfrentan. Dificultades que, de no sortearse de forma oportuna y decidida, podrían frustrar los proyectos de vida de generaciones completas. Por el contrario, si logramos estar a la altura del desafío, podríamos mirar el futuro con el optimismo propio de un país que supo enfrentar las complejidades propias del salto al desarrollo.

Estas cuatro crisis no son las únicas que hoy preocupan a los chilenos, pero tienen importantes elementos en común: gran envergadura e impacto, de compleja solución y recaen en áreas cuyo correcto funcionamiento es esencial para enfrentar muchos otros desafíos. Solo en la medida que las instituciones aseguren gobernabilidad y eficacia, que la economía crezca, que se generen empleos formales de calidad y que la educación sea verdaderamente una herramienta de movilidad social y cultura cívica, podremos estar a la altura de los complejos desafíos que nos depara el futuro en otras áreas. Son condiciones habilitantes para un adecuado funcionamiento del conjunto.

Por lo tanto, hoy podemos decir con propiedad que Chile se encuentra en un punto de inflexión, en una verdadera encrucijada y, también, decir que de nuestra capacidad de reacción y de la envergadura de esta, dependerá si de ella salimos fortalecidos, o si nos sumimos en el estancamiento y la mediocridad. Es necesario activar diversos espacios en la sociedad civil para contribuir a generar esa reacción. Hagámonos Cargo propone ser uno de ellos.

Crisis Desarrollaremos secuencialmente 4 ciclos para cada una de las crisis o desafíos.

  • Crisis 1: Institucionalidad. Desafío 1: Gobernabilidad y eficacia institucional: Administración del Estado, sistema político y Poder Judicial.
  • Crisis 2: Economía. Desafío 2: Economía dinámica y sostenible fundada en nuestras riquezas naturales.
  • Crisis 3: Educación. Desafío 3: Educación como mecanismo de movilidad social y cultura cívica.
  • Crisis 4: Empleo. Desafío 4: Empleo formal como palanca de desarrollo personal y protección social.

El propósito: Las crisis que se abordarán tienen alto impacto en la vida de las personas, a pesar de lo cual normalmente son desplazadas del debate público por propuestas cortoplacistas y efectistas. Hagámonos Cargo se propone identificar
mínimos comunes y discrepancias sobre los diagnósticos y políticas públicas para enfrentarlas, y, sobre todo, sentar las bases de iniciativas de incidencia pública que contribuyan a trazar cursos de acción para impulsar la implementación de dichas políticas. Sólo así podremos romper la inercia que entrampa el avance en estas cuatro áreas, y la sensación abrumadora de que se trata de una tarea imposible.

Objetivos

1. Converger en un diagnóstico compartido y en las políticas públicas a priorizar en torno a cada una de las crisis o desafíos, dejando constancia de las discrepancias;

2. Crear confianza y capital social entre personas diversas para que puedan comprometerse y ser co-responsables de generar acciones de incidencia de manera articulada en el debate público de los próximos años; y

3. Ofrecer una metodología diferente y efectiva, que contribuya a mejorar los procesos de deliberación y diálogo a partir de legítimas posturas discrepantes.

Metodología

La metodología será la síntesis de una combinación de diversas experiencias nacionales e internacionales que permitirán a un conjunto de personas, participar de un proceso transparente, riguroso y ágil para generar diálogo, acuerdos, síntesis y priorizaciones de temáticas relevantes.

El programa tendrá como núcleo central 4 espacios de conversación, deliberación y priorización, los “Foros de Deliberación”, cada uno con un foco específico.

  • Foro 1: Diagnóstico. ¿Cuáles crees que son los factores descriptivos o subyacentes de la crisis? ¿Cómo se expresan en evidencia o hechos contingentes?
  • Foro 2: Razones. ¿Cuáles crees que son las principales barreras que impiden avanzar? ¿Y las oportunidades para romper la inercia?
  • Foro 3: Acciones. ¿Cuáles debieran ser las principales líneas de acción de política pública? ¿Qué reformas de corto y mediano plazo se debieran priorizar?
  • Foro 4: Incidencia. ¿Qué iniciativas de incidencia se debieran emprender? ¿Cuáles debieran ser sus objetivos y quienes los receptores del mensaje?

Cada sesión comenzará con una síntesis de la sesión anterior, y con una provocación inicial sobre las preguntas que se abordarán. Ambos antecedentes servirán para establecer el perímetro de la discusión, los que, por supuesto, podrán ser desafiados por los participantes.